La Ciudad perdida en el fondo del mar

Un descubrimiento sorprendente fue el que se dio cerca de Alejandrí­a, cuando algunos buzos hallaron los restos de la ciudad de Herakleion, sumergida en el mar a unos seis kilómetros de la costa de la ciudad egipcia de Abukir, en el mar Mediterráneo. Los restos de la ciudad aparecieron cuando un grupo de exploradores e investigadores rastreaba la superficie del mar de Abukir, en busca de los restos de la batalla que enfrento en esas aguas la flota de Napoleón contra la flota de Nelson, en 1789.
Según la historia, Herakeion fue, hasta la fundación de Alejandrí­a, en el año 331 a.C.; el paso hacia Egipto y su principal estación aduanera, y era, según algunas esculturas que se han hallado, una ciudad que estaba dedicada a Hércules.
Entre los restos encontrados hay estatuas de faraones que alcanzan los seis metros de altura, además de sarcófagos y cofres de granito también colosales, y entremezclados entre ellos, capiteles, esfinges y estatuas de Isis y Serapis. Según las investigaciones, algunas de las piezas encontradas se remontan hasta la dinastí­a XXVI (de los siglos VI a VII a.C.) y a la dinastí­a XXX (en el siglo IV a.C.). También se hallaron monedas de las épocas bizantinas e islámica.
Herakleion, según los descubridores, era pequeña, de apenas un kilometro cuadrado, y fue hasta la fundación de Alejandrí­a la principal ciudad portuaria en el delta del rio Nilo.
Los restos de la ciudad sumergida, con sus calles, templos y casas adoquinadas en ruinas, se encuentran a unos seis u ocho metros bajo la superficie del mar, cubiertos por una capa de arena, que tiene un grosor de 30 centí­metros. Lo que ha aparecido hasta ahora son las murallas, que alcanzan los 90 metros de extensión, y el muelle de la ciudad, que tiene unos 150 metros.
Según los encargados de la expedición, la causa del hundimiento de la ciudad pudo haber sido un terremoto, lo que se supone a partir del examen de las paredes de las casas que están caí­das como piezas de domino.
Los registros históricos señalan que Herakleion estaba situada en la desembocadura de uno de los brazos del rio Nilo, que se llenó de arena con el paso del tiempo. Herakleion también esta mencionada en la mitologí­a griega, que señala que el rey de Esparta, Menelao, interrumpió su viaje a casa al llegar ahí­, después de haber recuperado a su esposa Helena de Troya.

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