Besos que vienen riendo, luego llorando se van, y en ellos se va la vida, que nunca más volverá.
- Se viaja no para buscar el destino sino para huir de donde se parte.
- Todo acto de bondad es una demostración de poderío.
- La envidia es mil veces más terrible que el hambre, porque es hambre espiritual.
- A veces, el silencio es la peor mentira.
- El modo de dar una vez en el clavo es dar cien veces en la herradura.
- Hay que sentir el pensamiento y pensar el sentimiento.
- Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado.
- Contra los valores afectivos no valen razones, porque las razones no son nada más que razones, es decir, ni siquiera verdad.
- Tu desconfianza me inquieta y tu silencio me ofende.