Este camino que se me ha cerrado tantas veces, por lo cual no puedo progresar, quiero Señor Todopoderoso que me lo abras. Yo no deseo hacerle mal a nadie, únicamente anhelo ser feliz y para llegar a eso necesito los caminos despejados de envidias y maldad. Amen.
(Encender un velón de color blanco)