Oración Para Protegerte Con la Sangre De Cristo tu familia y negocios, Oración milagrosa para peticiones difíciles, pedir por trabajo en la oración, Oración para la bendición de nuestro hogar.
Antes de pronunciar esta poderosa oración, realiza este Acto de confianza en el Señor:
Oh Jesús, mi querido Jesús, Tú que aboliste la muerte y trajiste la vida a la luz, líbrame de los errores, de los pensamientos vanos y de las tinieblas eternas. Mi amado Jesús, Tú que eres la sabiduría y el poder de Dios, Tú que eres la verdadera paz, concédeme el arrepentimiento y el perdón de mis pecados.
Con toda mi fuerza, te honro, adoro y obedezco. Acepta este acto de amor y confianza hacia ti. Reconozco que eres mi Buen Pastor y que me guías a través de tu Palabra. Cuando vienes a mí, encuentro descanso, seguridad y paz. Me siento protegido y defendido, ya que confío en tus planes para mí.
Confió plenamente en ti, Jesús, y te entrego mis preocupaciones. Descanso en ti con confianza, esperando que me liberes de cualquier daño. Te pido que me alejes de todo aquello que pueda dañar mi mente y mi cuerpo, y te ruego que me ayudes a alcanzar mi propia salvación.
Poderosa oración para protegerme de todo mal.
Invoco la poderosa protección.
La Sangre de Cristo, que es el Redentor Preciosísimo,
Rey del universo y Rey de reyes.
En el nombre del Padre Dios, en el nombre del Hijo Dios.
En el nombre del Espíritu Santo de Dios:
con el Poder de la Sangre de Jesucristo el Señor,
yo sello y protejo, protejo y sello,
mi mente consciente, inconsciente y subconsciente,
mis pensamientos, mis emociones, mis sentimientos,
mis sentidos, mi ser físico, mi ser mental,
mi ser material, y mi ser espiritual.
Oh Dios mío, ven en mi ayuda, Señor, date prisa en ayudarme.
Todo lo que soy, todo lo que poseo, todo de lo que soy capaz.
Todo lo que sé y todo lo que amo, está sellado y protegido
por el poder de la Sangre de Jesucristo el Señor.
Sello mi pasado, presente y futuro,
sello mis planes, metas, proyectos, sueños y aspiraciones,
todo lo que emprendo, todo lo que comienzo,
todo lo que pienso y hago, todo lo que siento y digo
está bien sellado y protegido
con el poder de la Sangre de Jesucristo el Señor.
Me sello a mí mismo, a mi familia, mis posesiones,
mi casa, mi trabajo, mi negocio,
Mi árbol genealógico, el pasado y el futuro, todo está bien sellado y protegido, con el Poder de la Sangre de Jesucristo el Señor. Me escondo en la herida del Costado herido de Jesús, me escondo en el Corazón Inmaculado.
Que la Santa Virgen María me proteja para que nadie pueda dañarme con sus acciones, palabras o intenciones maliciosas. Que me proteja de cualquier daño o perjuicio en mi vida emocional, mi bienestar financiero y mi salud física, ya sea por influencias negativas, envidias, chismes, calumnias o el uso de hechizos y maldiciones.
Oh Dios mío, ven en mi ayuda, Señor, date prisa en ayudarme.
Todo mi ser está sellado y herméticamente sellado,
todo a mi alrededor está sellado,
y yo ……. estoy protegido para siempre
por la Preciosísima Sangre de nuestro Redentor.
Jesús, defiéndeme del enemigo infernal y de todo mal,
ten piedad de mi debilidad, no me abandones en estos momentos,
permanece siempre a mi lado para defenderme
y líbrame de toda adversidad con tu poder.
Señor Jesucristo, clamando por tu remedio
creyendo con esperanza en Ti y confiando plenamente en Ti
haz que así sea por el poder de tu Preciosísima Sangre
e invocando tu dulce Santo Nombre
cualquier maldición u otro mal se disolverá y volverá a la nada,
que no puede permanecer, volver o aparecer de nuevo,
y también todas las cosas del espíritu maligno que, junto con su malicia, marcharán por los siglos de los siglos.
Mi amado Jesús, el mundo es tu Reino,
proclama tu verdad y tu justicia, tráenos tu paz y tu perdón.
En tus manos encontramos descanso,
Señor, permítenos acudir a ti en toda necesidad,
recíbenos con agrado y danos tu bendición,
bendice especialmente a esta persona (o casa, o negocio…)
para que, confortados por tu bendición
podamos servirte y reconocerte como el único Salvador.
El Señor esté con nosotros. Alabado seas, Señor.
Amén, amén, amén Jesús, todo lo espero de Ti.
Que mis peticiones se cumplan cuanto antes, según la voluntad de Dios. Recita el Credo, el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria.
Mientras realices tus oraciones y rezos, enfoca tus pensamientos en tus deseos y pide que cualquier mal que te afecte y te impida tener paz sea alejado de ti, de tu vida y de tus seres queridos. Permite que Jesús, con su misericordia, te ayude. Para mayor efectividad, es recomendable tener una vela blanca encendida a tu lado y dejarla encendida hasta que se consuma.
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