A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante.
- Un hombre puede ser feliz con cualquier mujer mientras que no la ame.
- Las mujeres han sido hechas para ser amadas, no para ser comprendidas.
- No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo.
- Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente existe, eso es todo.
- No hay nada como el amor de una mujer casada. Es una cosa de la que ningún marido tiene la menor idea.
- La única ventaja de jugar con fuego es que aprende uno a no quemarse.
- Si usted quiere saber lo que una mujer dice realmente, mírela, no la escuche.
- Las preguntas no son nunca indiscretas. Las respuestas, a veces sí.
- Cínico: un hombre que sabe el precio de todo y el valor de nada
- Uno debería estar siempre enamorado. Por eso jamás deberíamos casarnos.
- Estoy convencido de que en un principio Dios hizo un mundo distinto para cada hombre, y que es en ese mundo, que está dentro de nosotros mismos, donde deberíamos intentar vivir.
- La mejor manera de librarse de la tentación es caer en ella.
- La única manera en que un hombre debe comportarse con una mujer es: haciendo el amor con ella, si es bonita, o con otra, si es fea.
- Los niños comienzan por amar a los padres. Cuando ya han crecido, los juzgan, y, algunas veces, hasta los perdonan.
- El trabajo es el refugio de los que no tienen nada que hacer.
- Perdona siempre a tu enemigo. No hay nada que le enfurezca más.
- Que hablen de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen.
- Lo único capaz de consolar a un hombre por las estupideces que hace, es el orgullo que le proporciona hacerlas.
- Las mujeres feas son celosas de sus maridos. Las bonitas no tiene tiempo, ¡están siempre tan ocupadas en estar celosas de los maridos de los demás…!
- Amarse a sí mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida.
- Haría cualquier cosa por recuperar la juventud… excepto hacer ejercicio, madrugar, o ser un miembro útil de la comunidad.
- No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo.
- La ambición es el último refugio del fracaso.
- El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices.
- Cuando un hombre se casa por segunda vez, es porque adoraba a su primera mujer.
- La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar.
- Cómo tener confianza de una mujer que le dice a uno su verdadera edad. Una mujer capaz de decir esto es capaz de decirlo todo.
- El cinismo consiste en ver las cosas como realmente son, y no como se quiere que sean.
- En el mundo común de los hechos, los malos no son castigados y los buenos recompensados. El éxito se lo llevan los fuertes y el fracaso los débiles.
- La fuerza de las mujeres depende de que la psicología no puede explicarla. Los hombres pueden ser analizados; las mujeres sólo pueden ser amadas.
- Escojo a mis amigos por su buena apariencia, a mis conocidos por su carácter y a mis enemigos por su razón.
- Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad; si lo hiciera, dejaría de ser artista.
- No soy tan joven como para saberlo todo.
- Cualquiera puede simpatizar con las penas de un amigo, simpatizar con sus éxitos requiere una naturaleza delicadísima.
- Los solteros ricos deberían pagar más impuestos. No es justo que unos sean más felices que otros.
- La tragedia de la vejez no es que uno sea viejo, sino que uno es joven.
- Es terriblemente triste eso de que el talento dure más que la belleza.
- La única diferencia que existe entre un capricho y una pasión eterna es que el capricho es más duradero.
- Como mala persona soy un completo desastre. Hay montones de gente que afirman que no he hecho nada malo en toda mi vida. Por supuesto sólo se atreven a decirlo a mis espaldas.
- El hombre puede soportar las desgracias que son accidentales y llegan de fuera. Pero sufrir por propias culpas, ésa es la pesadilla de la vida.
- Hay mucho que decir en favor del periodismo moderno. Al darnos las opiniones de los ignorantes, nos mantiene en contacto con la ignorancia de la comunidad.
- Los hombres casados son horriblemente aburridos cuando son buenos maridos, e insoportablemente presumidos cuando no lo son.
- Cuando se está enamorado, comienza uno por engañarse a sí mismo y acaba por engañar a los demás. Esto es lo que el mundo llama una novela.
- La experiencia no tiene valor ético alguno, es simplemente el nombre que damos a nuestros errores.
- Es bastante difícil no ser injusto con lo que uno ama.
- La realidad es que los éxitos se los llevan los fuertes y el fracaso los débiles, y eso es todo.
- Mejor ser un cohete caído que no haber resplandecido nunca.
- Cuando la gente está de acuerdo conmigo siempre siento que debo estar equivocado.
- Vivir es lo más raro de este mundo, pues la mayor parte de los hombres no hacemos otra cosa que existir.