Se trata de uno de los tarots más antiguos del mundo, creado a finales del siglo XV. La leyenda cuenta que Jacquemin Gringonneur fue su artífice y que las hizo por encargo de Odette, una amante del soberano, para tener entretenido al rey en sus horas de ocio. Algunas de estas cartas se exponen en la actualidad en la Biblioteca Nacional de París.
Su aparición data de entre 1730 y 1740. Contiene 78 cartas, con nombres distintos a los que conocemos (por ejemplo El Juicio es aquí Júpiter, carta número 20).
Ya desaparecido, este tarot nació en el siglo XV, y su especialidad es florentina. Consta de 97 cartas y como curiosidad los caballos no son tales, sino centauros.
Es un tarot que data del siglo XVII, y se piensa que nació en círculos masónicos, siendo posteriormente muy bien acogido en los mismos. Representa imágenes sagradas de la Biblia.
Fue creado sobre el siglo XVII, y su autor fue Francesco del Cossa. Encierra muchos mensajes distintos y tiene bastante relación con el esoterismo. Se trata de un tarot en el que se presentan diferentes fases espirituales y como curiosidad sus números aparecen tanto en caracteres arabigos como romanos.
OTROS MODELOS DE TAROT