El impresionismo no puede ser más genial y místico de la mano de Van Gogh. Todo lo que pintaba era lo que veía en su interior.
Muchos espíritus avanzados plasman sus sensaciones en poemas, novelas, canciones, pero Van Gogh lo hacía ha través de la pintura. Muchos consideran que estaba loco, pero de hecho el genio y la locura van de la mano.
Inclusive, él consideraba la pintura como un medio de salvación personal y hasta de modificar la sociedad. Era profundamente caritativo y quiso ingresar a un seminario evangélico para desarrollar la beneficencia, pero no fue admitido por no saber griego, latín y su carácter.Rembrandt influyó mucho en su cromatismo, aunque de estilos muy diferentes, hasta que descubrió el impresionismo y su potencial en manifestar la luz como nunca antes se había hecho.
En la etapa de desavenencias con otro genio Gauguin, se le llegó a internar en un sanatorio de la mente, pero nunca dejó de pintar. La historia de la oreja cortada de Van Gogh fue precisamente con este amigo, y no se sabe a ciencia cierta quién cortó la oreja, él o Gauguin.
Gauguin, uno de sus cercanos amigos, en su obra última de casi 4 mts. de largo, ¿De dónde venimos? ¿Quiénes Somos? ¿Adónde vamos?, estaba mal económicamente, de salud y peleado con Dios. En su cuadro comienza con una momia, centraliza la manzana de Adán y otros detalles místicos.
Van Gogh produjo alrededor de mil pinturas y unos 1,600 dibujos. En la mayor parte de las pintura puede ver las auras de los personajes y plasmarlas. Encierran un simbolismo esotérico muy interesante. Su misticismo es grandioso.
De todas sus pinturas sólo vendió una sola: Viñedo Rojo. Lo compró Anna Boch, pintora impresionista belga, hermana de Eugene, también pintor y amigo de Gauguin y Vincent Van Gogh.
Pudo captar el mensaje de la luz en todas las dimensiones que se reflejan en la vida cotidiana, que son similares a los estados meditativos o cuando se practica chamanismo ayudado con plantas rituales.
No fue un pintor de lo físico sino de lo espiritual, de otras vibraciones y estados de conciencia que cohabitan con todos nosotros.
En muchos de sus pintura se puede ver el sol reflejado con todo su poder y éste poder perdura aún en sus pinturas nocturnas.
Fue un místico, predicaba como misionero, se tomó muy en serio el seguir a Cristo. Se las ingeniaba para repartir víveres y ropa entre los más necesitados a pesar de sus carencias para él mismo. Sobrevivía gracias a su hermano, pero estaba siempre en pobreza.
Ante la industrialización de la producción, se acercó a los campesinos manifestando que eran lo único natural que quedaba. Asimismo, manifestó su deseo de pintar a los mineros, tejedores, para sacarlos a la luz. Es decir se condolía con las clases más necesitadas.
Sus pinturas reflejan espiritualidad, misticismo, adicionalmente a su genialidad y simbolismo esotérico profundo.
Vale la pena que disfrutes de todas sus pinturas, si ingresas a estados meditativos con seguridad que llegarás a entenderlo y amarlo.