¡Oh amor poderoso¡ Que a veces hace de una bestia un hombre, y otras, de un hombre una bestia.
- A mayor talento, en la mujer, mayor indocilidad.
- Anunciad con cien lenguas el mensaje agradable; pero dejad que las malas noticias se revelen por sí solas.
- Asume una virtud si no la tienes
- Cualquiera puede dominar un sufrimiento, excepto el que lo siente.
- Cuidado con la hoguera que enciendes contra tu enemigo; no sea que te chamusques a ti mismo.
- De lo que tengo miedo es de tu miedo.
- Duda que sean fuego las estrellas, duda que el sol se mueva, duda que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo.
- El amor consuela como el resplandor del sol después de la lluvia.
- El amor de los jóvenes no esta en el corazón, sino en los ojos.
- El amor, como ciego que es, impide a los amantes ver las divertidas tonterías que cometen.
- El aprendizaje es un simple apéndice de nosotros mismos; dondequiera que estemos, está también nuestro aprendizaje.
- El aspecto exterior pregona muchas veces la condición interior del hombre.
- El cansancio ronca sobre los guijarros; en tanto que la pereza halla dura la almohada de pluma.
- El desdichado no tiene otra medicina que la esperanza.
- El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.
- El hombre a quien no conmueve el acorde de los sonidos armoniosos, es capaz de toda clase de traiciones, estratagemas y depravaciones.
- El hombre cauto jamás deplora el mal presente; emplea el presente en prevenir las aflicciones futuras.
- El pasado es un prólogo.
El que gusta de ser adulado es digno del adulador. - El que muere paga todas sus deudas.
- El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño hecho.
- El traje denota muchas veces al hombre.
- En la amistad y en el amor se es más feliz con la ignorancia que con el saber.
- En nuestros locos intentos, renunciamos a lo que somos por lo que esperamos ser.
- En un minuto hay muchos días.
- Es amor bien pobre el que puede evaluarse.
- Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada.
- Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras.
- Fragilidad tiene nombre de mujer
- Fuertes razones, hacen fuertes acciones.
- Guarda a tu amigo bajo la llave de tu propia vida.
- Hasta en la muerte de un pajarillo interviene una providencia irresistible.
- Jamás viene la fortuna a manos llenas, ni concede una gracia que no haga expirar con un revés.
- La brevedad es el alma del ingenio.
- La conciencia es la voz del alma; las pasiones, la del cuerpo.
- La fortuna llega en algunos barcos que no son guiados.
- La juventud, aun cuando nadie la combata, halla en sí misma su propio enemigo.